Si el ciberataque que sufrimos desde el viernes busca apagar nuestras voces, han conseguido lo contrario. El Salto y La Marea nos reafirmamos en nuestra lucha por la libertad de información y en nuestro compromiso frente a los generadores de odio, y agradecemos la gigantesca oleada de solidaridad que hemos recibido desde entonces.
El viernes al mediodía la página web del diario El Salto dejaba de funcionar por un ataque de denegación de servicios (DDoS). Poco después, también caía la web de La Marea por el mismo ataque informático. Le seguían Arainfo y Kaos en la Red, así como Nodo50, que provee de servicios a estas páginas. El ataque se suma al que el medio de comunicación La Última Hora sufre desde hace diez días.
Esta acción tiene graves consecuencias económicas sobre los medios afectados, pero en primer lugar debemos destacar las consecuencias políticas sobre el conjunto de la sociedad. El Salto y La Marea hemos sido retirados desde el viernes de la vida pública. Se han intervenido las vías de comunicación principales de estos y otros proyectos, retirando el acceso a información, propuestas editoriales, contenidos culturales y de divulgación, de nuestros más de tres millones de lectores y lectoras mensuales y de nuestros públicos potenciales. Nos han silenciado.
Este acto y sus precedentes suponen un aviso muy serio de cara al futuro. La historia nos ha enseñado que la información y la libertad son los principales antídotos contra los ataques a la democracia.
Ante los ataques, miles de personas nos han mostrado su apoyo y solidaridad. Sabemos que no estamos solas ni solos, que nuestras comunidades nos están sosteniendo a pesar de que no estemos pudiendo prestar el servicio, la atención y el cuidado que dedicamos a nuestros reportajes, nuestras entrevistas y nuestras informaciones. No os vamos a engañar, está siendo muy duro. Nos gustaría estar en otra situación y no tener que redactar textos que hablen de nosotros para seguir haciendo aquello a lo que le dedicamos tanto amor, tantos recursos y tanto tiempo. Pronto lo estaremos haciendo con vuestra ayuda.
Os sentimos muy cerca y estamos mucho más unidas frente al odio.